La Monja Blanca, flor nacional de los guatemaltecos
Su historia como flor nacional de Guatemala empieza a finales de 1933, en una exposición internacional de flores realizada en Miami, Florida, Estados Unidos.
La historia señala que fue la presidenta de esa actividad, Letitia Southerland, quien al terminar su exposición decidió enviar una carta al entonces presidente de Guatemala, Jorge Ubico.
En el escrito le agradeció haber ordenado que se le fueran enviadas un grupo de orquídeas nativas.
Southerland sabía que Guatemala no contaba con una flor nacional, entonces sugirió que fuera la Lykcaste Virginalis Alba o Skinnery alba -la Monja Blanca- la que tomara ese lugar.
Southerland creía que la Monja Blanca era la flor que destacaba entre todas, por su belleza.
Al llegar a Guatemala la sugerencia fue remitida a los trabajadores del Gobierno. Y al día siguiente fue publicado un Acuerdo Gubernativo en 1934, donde Ubico establecía que la Monja Blanca, que crece en los bosques de Alta Verapaz, era la Flor Nacional.
En 1840, es el botánico Jean Jules Linden quien da a conocer a nivel mundial esta orquídea. Se dice que él fue quien la llamó Lycaste, en honor de la hija de Príamo y hermana de Héctor y Paris, personajes de La Ilíada de Homero.
En peligro de extinción
El símbolo patrio, ha desaparecido de su hábitat natural, debido a la deforestación, según el Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap). Y hoy, estos ejemplares solo pueden encontrarse en colecciones privadas.
El riesgo de que la Monja Blanca sea extinta lleva años. Por eso el presidente Juan José Arévalo (1945-1951), emitió un Acuerdo Gubernativo en 1947 donde prohibía la libre colecta y exportación de la planta, sus bulbos y flores.
Fue incluida en la organización de Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres.
La Monja Blanca sobre sale entre otras orquídeas debido a que sus pétalos como sépalos carecen de pigmentación, de ahí su color blanco, como de cera, explica el historiador Horacio Cabezas.
No es una planta parásita, epífita -que vive sobre otras-. Es conocida en idioma kekchí como sak xochitl tziquinajá.
La Asociación de Periodistas de Guatemala (APG) ha instituido la condecoración anual Monja Blanca, para otorgarla al artista más distinguido del año.