Nicolle Bruderer, la meta son los Juegos Olímpicos 2020
Nicolle Bruderer es guatemalteca, ciclista profesional miembro del equipo Tibco Silicon Valley Bank, el programa profesional femenino más antiguo de los Estados Unidos.
En entrevista con mundochapin.com la ciclista nos cuenta sobre ella, sus entrenos y nos platica de su más grande meta: prepararse para lograr representar a Guatemala en los Juegos Olímpicos que se celebrarán en Tokio, durante 2020.
Por Gustavo Balcárcel
Sobre Nicolle…
-Me gradué de la Universidad de Colorado en 2016, como administradora de empresas. En 2017 decidí enfocarme en el deporte. Así que cuando no entreno, descanso y me recupero para el siguiente entreno.
Durante el día cocino, descanso y leo normalmente. Si estoy con mi equipo nos aseguramos de usar el tiempo para conocernos mejor y a veces tengo compromisos con patrocinadores en sus oficinas o dar entrevistas.
Nicolle, cuéntanos cómo iniciaste en el ciclismo ¿Qué pasaste para llegar a ser la deportista profesional que hoy eres?
-La federación de ciclismo tenia un entrenador que quería crear una selección juvenil femenina en la pista y él fue el que me introdujo al mundo del ciclismo.
Me encantó la disciplina y lo complejo que es el deporte. En la Universidad de Colorado me di cuenta que tanto me gustaba, y poco a poco el entreno se puso más intenso, las competencias más difíciles.
Hice la transición de pista a ruta conforme pasaron los años y finalmente en 2016 firme contrato profesional con un equipo de ruta, Tibco Silicon Valley Bank.
No es fácil llegar a estar al nivel profesional y mucho más difícil es mantenerse en él. Es mucho sacrificio físico y emocional. Hay que aprender a estar lejos de la familia y amigos y estar dispuesta a dar todo por el deporte.
No es una vida glamurosa y se necesita mucha pasión para poder estar a nivel porque llega un momento donde todas las competidoras tienen el nivel físico necesario. Es la actitud lo que hace la diferencia entre los deportistas en general, a los exitosos y los que no. Me encanta y no me veo en otra actividad en este momento.
Sobre tu estilo de vida, puedes contarnos las modificaciones que debiste hacer para alcanzar lo que has logrado
-Tengo la dicha de poder ser atleta profesional, pero esto requiere mucho sacrificio. Tengo que llevar una vida saludable en muchos sentidos. Tengo que estar bien físicamente, y eso quiere decir la parte del entrenamiento, nutrición y recuperación. Los tres aspectos son importantes para estar bien físicamente y poder rendir. Si no recupero no puedo entrenar bien. Para recuperar necesito una dieta saludable y esto también influye que tan bien se descansa en la noche. Todo está conectado. Otra parte de llevar una vida saludable es el área mental.
Tengo que tener fuerza de voluntad, disciplina, motivación, entre otros. Ser fuerte de la cabeza es un porcentaje muy grande del éxito que se obtiene sobre la bici. Hay que saber llevar la mente siembre positiva y entender que es lo que funciona para uno como atleta. Es decir, no me puedo comparar con los demás porque todos somos diferentes y lo que funciona para uno no siempre funciona para otro.
El tercer aspecto de una vida saludable es el área espiritual. Hay que estar en paz con uno mismo y con la gente que tenemos alrededor. Cuando uno está feliz las cosas salen bien. Yo soy católica y para mi estar cerca de Dios y mi familia es importante. Cuando estas tres áreas están balanceadas: lo físico, lo mental y lo espiritual, es cuando las cosas salen bien y uno vuela en la bici.
¿Cómo entraste a la federación?
-Actualmente vivo en Colorado. Viajo muchísimo por Estados Unidos y por el mundo entonces mejor decidí quedarme en este país. El entreno y el roce que tiene Estados Unidos con otros ciclistas es lo que hace muy valioso vivir aquí.
Entré a la selección juvenil de pista en 2011 y desde entonces soy parte de ella. Es muy duro estar fuera del país y pertenecer a la federación porque no se puede estar en los entrenos convocados y no se puede entrenar con selección.
Entonces requiere de mucha disciplina y comunicación con la federación, que no es fácil siempre. Uno se pierde también de los beneficios de Comité Olímpico Guatemalteco –COG- como nutrición, fisioterapia, entre otros.
¿Por qué te fuiste de Guatemala. Vuelves a al país para quedarte o solo de visita?
-Me encantaría poder vivir en Guatemala, pero no se puede entrenar por el poco respeto al ciclista que hay en el país y por la poca competencia que hay. Para poder estar al nivel de una ciclista profesional necesito poder entrenar con atletas que tienen nivel superior al mío, es la única manera de mejorar. En la pretemporada si estuve en Guatemala por tres meses, pero no sé si vuelva este año o si me toquen competencias durante esos meses en los que normalmente se hace la pretemporada entre octubre y febrero.
Háblanos del equipo Tibco – SVB ¿Cómo entraste a este equipo? ¿Cuánto llevas con ellos, y qué significa para un guatemalteco pertenecer a esta agrupación?
-El equipo Tibco SVB es el programa profesional femenino más viejo de Estados Unidos. Ha estado por más de diez años dirigido por la dueña, Linda Jackson.
Fue a finales del 2016 que aplique a algunos equipos profesionales de ruta en Estados Unidos y este fue el programa que me ofreció trabajo y que más me gustó.
Firmé con el equipo por la temporada de 2017. Me gusta el horario de carreras que tiene porque me deja correr las mejores carreras del país y en Europa sin tener que vivir muy lejos de Guatemala.
El material que me ofrecen es bueno, compito en bicicletas Fuji y la verdad que me han gustado mucho. El staff que tiene el equipo es eficiente y siempre están pendientes de que no me falte nada. Eso hace una gran diferencia a la hora de tener buen rendimiento físico ya que solo me tengo que preocupar de eso.
Esta es la primera vez que una guatemalteca firma con un equipo profesional de ciclismo. Me atrevería a decir que tampoco ningún hombre ha llegado a este nivel.
Estoy muy orgullosa de lo que he logrado y sé que es solo el comienzo de algo grande. Me encanta cumplir mis metas, pero me encanta más poner el nombre de Guatemala en alto y siento que poco a poco lo voy a lograr.
Siento gran responsabilidad por abrir esta brecha para mujeres en todos los deportes, no solo ciclismo.
¿Cómo es tu entrenamiento?
-El entreno cambia conforme pasan los meses. Todo empieza en la pretemporada, cuando se hace alto volumen en la bici entre 4 y 5 horas diarias. Y esto se combina con trabajos de fuerza en el gimnasio.
Poco a poco se deja el gimnasio y las horas en la bici se acortan, pero se le meten trabajos de intensidad -2.5 a 3.5 horas- con trabajos específicos ya sea de velocidad o fuerza.
Cuando ya se tiene cierta intensidad se empieza a competir. Cuando ya estoy en competencia el entreno se vuelve muy corto y lo que es importante es la recuperación entre carreras. Los entrenos se acortan y son suaves. Estirar es importante siempre, durante todo el año.
¿Cuál es la mejor edad para competir como ciclista. Existe algún límite?
-Como es un deporte de resistencia, entre más tiempo se practique mejor. También, entre más compite uno mejor se vuelve tácticamente y físicamente.
Normalmente las mujeres entre 25-32 andan muy bien pero siempre hay un par que están por debajo o por arriba de este rango que son campeonas del mundo. Depende mucho a que edad empezó a practicar el ciclismo.
¿Actualmente para que competencias entrenas?
-La meta grande de este año era poder ser parte del equipo Tibco SVB e ir a todas las competencias posibles para foguearme para cuando se corrieran Centro Americanos en Nicaragua con la selección de Guatemala.
Esa es la única competencia específica para la que me he estado preparando. Todas las que corro con Tibco SVB son importantes por supuesto, pero como es una dinámica de equipo, es diferente. También la meta de este año con mi equipo era aprender, escuchar y entender cómo funciona un equipo profesional para empezar a construir poco a poco mi camino hacia Juegos Olímpicos 2020.
Estos tres años que quedan antes de olímpicos son importantes de llevar paso a paso. Es un proceso largo y no se pueden saltar escalones, hay que ir poco a poco.
Mi meta más grande son los Juegos Olímpicos 2020. Sé que falta mucho, pero hay que empezar a construir ese sueño olímpico desde ya.
¿Qué le dirías a los jóvenes guatemaltecos para que busquen algún deporte?
-El deporte es muy importante en la vida de los jóvenes. Te ayuda con la autoestima y te da oportunidades en la vida. Aparte que es bueno para la salud, es divertido.
El deporte te enseña disciplina, a ser responsable, a manejar el tiempo que es limitado, todas estas son cualidades que se necesitan en un trabajo de oficina. Las cualidades de un atleta de alto rendimiento son las cualidades de un ejecutivo exitoso, en mi opinión. Y esa ética de trabajo se aprende cuando uno es joven.
“Los invito a todos a que escojan un deporte que les provoque mucha pasión y alegría, y que le den duro. Hay una ventana muy chica para ser atleta y es cuando uno es joven y no tiene mucha responsabilidad más que en uno. Hay que combinar el estudio y el deporte, eso es muy importante también. No solo ser deportista, pero poder tener un título”.