Una guía que te ayudará a manejar tus duelos
En una sociedad donde la pérdida se ha hecho cotidiana es necesario que sus habitantes aprendan a manejar sus duelos para poder continuar.
Por Sandra Martínez
La mayoría de personas hemos atravesado por la amarga experiencia de enfrentar la pérdida de un ser querido o conocemos a algún amigo que está pasando por una situación dolorosa.
Brenda este año al ser despedida injustamente de su trabajo donde laboró 15 años sin que se le permitiera despedirse de sus amigos, ni del lugar donde vivió tantas experiencias y como si fuera poco, hace un mes enfrentó la muerte de su mamá quien estuvo enferma durante dos meses. Brenda se siente devastada con muchos deseos de llorar.
Un caso similar vive Carmen tras enterarse que su esposo le es infiel. Lucía se siente triste porque se jubiló hace dos meses de un lugar donde laboró 33 años. José se siente frustrado porque le robaron su vehículo. Julio se enteró que es diabético. Marta está a punto de casarse dejará vacío el nido donde vivió con sus padres durante 28 años. Carlitos cambió de escuela porque sus padres compraron una casa en otro lugar. José sufre porque recientemente sus papás se divorciaron y ya no estará con los dos a la vez y Karlita llora la muerte de su perro.
“Después de trabajar más de 30 años en el Hospital de Salud Mental del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) la experiencia me dice que somos un país sufrido. Alguien decía que para tener esperanza tenemos que disfrutar de la experiencia de haber ganado alguna vez, pero en Guatemala la mayoría de personas tiene pérdidas grandes, medianas o pequeñas que le afectan en su vida cotidiana”, afirma la Psicóloga Carola Estrada.
En Guatemala el nivel de desempleo es muy alto, muchos no tienen casa viven en la miseria, tienen falta de alimentos, sufren de frío. Si a esto le agregamos las trágicas noticias que transmiten los telenoticieros, los radio periódicos y en los medios escritos perdemos la fe en la humanidad y más aún cuando vivimos situaciones tan dramáticas como la corrupción es como ir perdiendo algo en la vida, explica.
Razones
Según la experta, si hacemos un listado de todas esas pérdidas y situaciones cotidianas que se viven en Guatemala terminamos siendo un país un tanto depresivo, y nos convertimos en una sociedad en un perpetuo estado de duelo como hipnótico.
Muchos trabajadores de las distintas instituciones del Estado también constantemente enfrentan pérdidas, pues cuando se da el cambio de gobierno las nuevas autoridades llevan a su respectivo equipo de trabajo, por lo tanto se sienten desplazados pues al arrebatarles su fuente de ingresos vienen una serie de problemas en el seno de su hogar.
Cuando hay un dolor físico nos podemos tomar un analgésico, pero cuando el dolor es en el alma no existe una pastilla que se pueda tomar para calmar el dolor que produce la pérdida de la madre, la pérdida del trabajo, le amputan la pierna a un paciente, le han diagnosticado cáncer o VIH a una persona.
Etapas del duelo
Es importante que cada persona que ha sufrido una pérdida conozca las etapas del duelo por las que tendrá que pasar. Es fundamental que tenga a la mano una guía que le permita superar el sufrimiento y evitar que su vida sea pesada, triste, apagada y llena de angustia.
El proceso del duelo puede llevar alrededor de un año, pero si simultáneamente se presentan varias pérdidas la persona puede caer en un estado depresivo sin saber en qué momento podrá salir de esa situación. Los duelos que no se afrontan correctamente se convierten en patológicos o complicados.
Durante el proceso el afectado podría presentar momentos de pánico, sentirse enojado con Dios, aislarse de sus amigos y familiares, puede sentir molestias corporales como insomnio, dolor de cintura, de espalda, de brazos, nauseas, falta de apetito o comer compulsivamente.
La necesidad humana de expresar nuestras penas nos hace tener sentimientos de impotencia, de tristeza y dolor cuando nos enfrentamos a una pérdida y para desahogarnos necesitamos llorar. Pero como socialmente somos tan severos es común que cuando una persona tiene una pérdida y la ven llorar hay quienes le dicen que no lo haga, sin tomar en cuenta que si no llora está bloqueando sus sentimientos, señala.
“A estas personas que le impiden llorar les puede decir: “yo estoy llorando porque ahora me toca continuar sin ella o sin él y porque lo extraño, no para impedirle su descanso”, recomienda Estrada.
En ocasiones las personas pueden sentirse tan mal que podrían tener problemas en su trabajo, con su pareja y hasta presentar tendencia al suicidio pues pierden el valor por la vida. Sin embargo, hay una gran cantidad de individuos que prefieren ignorar estas etapas y hacen como si no está pasando nada para no sentir dolor.
La ventaja de quienes conocen cuales son las etapas del duelo es que se sentirán más tranquilas pues comprenderán que en este proceso es normal sentirse triste y si se dan el permiso de llorar para sacar el dolor, esto le ayudará a llegar a la aceptación de lo sucedido y aprenderá a vivir con el dolor pero seguirá adelante con su vida.
Las etapas que se pueden presentar durante el proceso de duelo son: la negación, la tristeza, la ira, la culpa y la aceptación.
Cuando una persona está en negación no acepta lo que le está sucediendo y se dice así misma: “No es posible que esto me esté pasando a mí”. “No es cierto”, “es increíble”. Pero al darse cuenta que su situación es real siente ira, tristeza y se cuestiona así mismo que como va a enfrentar la vida sin la persona que falleció. A veces se siente culpable por las cosas que hubiera podido hacer para evitar que su ser querido se muriera.
Se llega a la aceptación cuando el individuo empieza a tomar conciencia de que realmente su ser querido murió y ya no la va a volver a ver, se convence de que tiene que buscar otro trabajo y tan bonito que era el que tenía, reconoce que de verdad se quedó sin carro porque se lo robaron y le tocará movilizarse en bus.
El arte como medio de expresión
Muchas personas que tienen sentimientos guardados utilizan las artes visuales, dibujo y pintura para expresarlos. Cualquier expresión artística que usted realice le ayudará a superar su proceso de duelo, lo único que tiene que hacer es atreverse.
Si le gusta tocar un instrumento, pero se queda en me gusta se pierde el sentido. Si usted dice voy a aprender a tocar un instrumento tiene que hacerlo. Esto tiene que ver con la actitud. Recuerde que no todos tenemos la misma habilidad para la música, pero si usted es sensible a la música puede afinar su voz para cantar.
Hay que atreverse a romper esos esquemas que le dicen que no es posible. Hay que pelear con la desesperanza, la negatividad, con el no puedo y con el temor. Si usted dice tengo miedo pero a pesar de eso se mantiene en una lucha constante para enfrentar la vida debe optar por todo aquello que le permita liberar el dolor.
No se olvide que sus sentimientos y pensamientos están vivos lo cual le da la capacidad de crear. Si usted no puede con el arte, haga ejercicios, actividades altruistas, la idea es que salga de su encierro para poder continuar con su vida.
Siga adelante trabaje su proceso de cualquier forma y recuerde que siempre hay hacia donde moverse. La ausencia del ser querido no le dejará de doler nunca, pero si aprenderá a vivir sin su presencia, pues su amor permanecerá para siempre y esto lo reconfortará.